13 de marzo de 2009

Van Hutten tenía razón

Jesús era como ustedes y como yo. Tenía huellas digitales y cuando caminaba dejaba la marca de su pie en la tierra...Necesitaba respirar. Necesitaba comer. Necesitaba dormir. Se reía. Podía hacer el amor con una mujer: tal vez hasta lo hizo. De su espalda brotaba sangre cuando lo torturaron, no metáforas o parábolas.

- Sin embargo, en la literatura fantástica los personajes deben ser comunes para que el efecto de lo inexplicable se destaque, sorprenda. Un Cristo maravilloso no produciría identificación y se podría explicar sólo desde el mito. Quizás por eso el cristianismo aún se mantiene.




... la inocente manzana... Fruta que, de hecho, no existió en ninguno de los dos casos. Es bastante improbable, por no decir ridículo, que Newton necesitara la caída de una manzana sobre su cabeza para descubrir la gravitación universal; le bastaba con que el Sol y la Luna no se cayeran.

- Sí, pero volvemos a la idea de la sal literaria como condimento de venta y difusión.

... En cuanto al árbol del Paraíso, en ninguna parte de este libro dice que ese árbol haya sido manzano. ¿El Bien y el Mal? El Bien y el Mal son más o menos la misma cosa, operando en distinta dirección... Supongo que hasta usted, de chico, rezaba el Padrenuestro. Muy bien, la traducción latina de esa plegaria dice: Et ne nos inducas in tentationen. No nos induzcas, o lo que es igual: no nos tientes. Los cristianos... hemos venido pidiéndole a Dios que no nos tiente. Que Él no nos tiente. En cierto modo, es aterrador. Todo el problema del Bien y el Mal se reduce a cómo interpretamos esa frase abismal...

- La importancia de saber lo que decimos es un signo más de nuestra libertad.



Castillo, A., El evangelio según Van Hutten.

2 comentarios:

adriana rey dijo...

El problema de la tentación es que al objeto que nos tienta ningún nombre le vendría bien, yo creo. El objeto de la tentación es indecible. Pero para escribirlo había que nombrarlo.
Muy interesante tu entrada. Cariños.

Yágoda dijo...

El tío Jean Paul le encontró la solución hace unos años.