Dijo Marshall McLuhan:
No
hay
en
absoluto
inevitabilidad
cuando
se
está
dispuesto
a
contemplar
lo que
está
sucediendo.
Una vez más es inevitable. Un virus trajo la agonía.
Estamos haciendo lo que podemos.
Quizás nada.
Quizás todo.
Es decir, nada.
Mi incapacidad no me permite ser yo en un espacio lleno de computadoras con gente que frenéticamente habla, juega, grita, ríe, tiene sexo, etc.
Pronto, muy pronto vuelvo.
Y, para mal o bien, con material acumulado.
Gracias por la paciencia.
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2 comentarios:
mucho gusto, la exquisita variedad de sus textos conmueven mi jardìn en invierno... saludos desde los simbolos.
Gracias.
Única palabra que puedo pronunciar. Contemplo el jardín.
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